Doble Juego 🔥

El tintineo de las copas llenas de vino resonó en el ambiente íntimo del salón. La luz tenue de las velas proyectaba somb

—Así que… ¿realmente nunca lo han intentado? —preguntó Javier, su mirada fija en Sofía mientras giraba lentamente el vino en su copa.

Sofía molesta con nerviosismo, intercambiando una mi

—Hemos fantaseado con ello —admitió ella, sintiendo el calor subir por su cuello—, pero nunca hemos dado el paso.

—Bueno, siempre hay una primera vez —susurró Lucía, inclinándose hacia Sofía con una sonrisa enigmática.

El aire se volvió espeso, cargado de anticipación. La idea había comenzado como un juego entre los cuatro, una conversación casual que con el tiempo se transformó en una posibilidad real. Ahora estaban allí, sentados en el lujoso departamento de Lucía y Javier, con la barrera de lo prohibido a punto de desmoronarse.

Javier dejó su copa sobre la mesa y deslizó una mano sobre la pierna de su esposa.

—Podemos tomarlo con calma. Ver hasta dónde queremos llegar.

Los ojos de Lucía brillaban con un desafío silencioso. Sofía sintió su corazón latir con fuerza cuando su amiga entrelazó sus dedos con los suyos. La sensación de otra piel femenina, de un contacto tan delicado pero con intenciones ardientes, la extrema.

—¿Y si jugamos? —propuso Lucía, su voz un susurro cargado de promesas.

El juego había comenzado.